* Mi valoración: NORMALITA, ambiciosa, hollywood de los 50.

De todo un poco. Mi rincón personal para breves reflexiones y reseñas de temas diversos: sociedad, espectáculos, Internet y sobre todo cine y cortometrajes en pantalla grande (c)Licencia de uso También puedes acceder a mis otros blogs











Con una trama que a priori es interesante (los trejemanejes en la corte española de Felipe II, con todo el lío que se formó con Antonio Pérez, la princesa de Éboli, la muerte de Escobedo,...) nos encontramos con una película bastante acartonada en su realización para estos tiempos (esos filtros vaporosos en la imagen, esos primeros planos inexpresivos) aunque algunas posiciones de cámara eran bellas en su búsqueda de la esquisitez. Del guión hay 2 elementos que no me gustaron: las escenas románticas entre la morisca y el comisario (fuera de tiesto) y la poca intervención (acción) del rey en las tramas sugeridas.
Las persecuciones y escenas de duelo eran más propias de una representación teatral que de un rodaje cinematográfico. El sonido grabado en estudio y superpuesto daban a la película un aire de irrealidad y teatralidad que no me convenció. Todo era más teatro que cine.
Volvemos al manido tema del cine español, que ya tocaba, sobre la postguerra española. Una historia pequeña, pero intensa por su situación. Lo mejor: los actores, tanto el matrimonio protagonista como los curas están logradísimos y todas las reacciones de ese tiempo. La actitud del marido a veces se me antojaba egoísta. Maribel Verdú estupenda. Se tiene el reto de trabajar con actores niños, pero el director lo solventa con planos cortos. La música bien, aunque terminar con el Píe Jesu de Fauré me pareció un poco fuera de tiesto. Suficiente.
Este verano, en mi semana playera, he cambiado mis típicos libros de cosmología teórica, por algo más ligero para leer frente al horizonte de la mar. Los crímenes del Museo del Prado es un libro de unas 500 páginas que se lee rápìdo, entretenido y fácil. Supone una serie de acontecimientos un poco estrambóticos con personajes anacrónicos con humor, donde la acción temporal (situada en los años 90) baila en el límite de la inverosimilitud (robótica, GPS,...). Lo considero literatura juvenil, donde al autor quiere asemejarse al sarcástico Jardiel Poncela, jugando incluso con el narrador, aunque a veces el libro peque de ligero. Tiene una intención ilustrativa y didáctica (aunque echo de menos una ilustración de los cuadros, que aunque bien conocidos, ayudaría a la lectura juvenil). Me gustan algunas expresiones del personaje Larra: Todo en la vida en un malentendido, las emociones dependen de la sugestión, daltonismo moral,... (entendidas en el contexto de su lectura). El final del caso me gusta, pero el final del libro no tanto.
Tengo que felicitar a PIXAR por su buen hacer en animación y por este ejemplo un tanto arriesgado (la mitad de la película no hay diálogos textuales), pero que sabe dar una fuerte dosis de entretenimiento gestual, de información sucinta y de entrañables personajes. La realización es impecable, limpia, ligera y colorida. El guión está bien construido, señalando muy bien las partes, el objetivo de la trama, y con un toque de chispa y sorpresa hasta el final. Las acciones de los personajes son entrañables y no sólo por los protagonistas sino también la cucaracha, el robot limpiador, etc. Recomendable tanto para niños como para adultos.
El nuevo Nokia N95 8Gb es un móvil-cámara-dispositivo de alta gama que está muy bien: cámara de 5 Mpx, conectividad WiFi, pantalla grandecita, capacidad de 8 Gb (internos), GPS con mapas de España, etc... pero tiene un fallo (bug) imperdonable para un móvil así: Al grabar vídeo, a veces y sin ninguna causa lógica, se corta la imagen (el sonido sigue) y el fichero guardado queda mal (de forma que si, por ejemplo, lo cambias de formato de .mp4 a .AVI) se desajusta todo.
Si en La Naranja Mecánica (Kubrick) veíamos cómo la violencia intenta ser corregida por la sociedad, en este remake plano-a-plano de Funny Games (1997) no sucede nada de eso. Es la maldad en estado puro. Una maldad gratuita, que entra en tu casa, que la invitas a entrar. Una maldad sin objetivo, simplemente maldad. Una película bien hecha, con planos muy largos, tremendamente naturales, al igual que su ausencia de música. La cámara no busca el morbo, ni la sangre, ni el desnudo: lo cruel suele quedar en el fuera de plano. Brutal.

El estreno de largo de Nacho Vigalondo no podría ser mejor. Una película de las llamadas de ¿bajo presupuesto? que engancha desde el primer momento gracias a un guión muy, muy currado que aunque a veces en detalles peque un poco de inocente (apuntar con tijeras, venda extensible, etc) no supone nada para la robustez y ocurrencia de la película. Es mejor no saber nada del argumento para disfrutar de este galimatías de pistas del que nos va tirando el director. Y a parte de ello, en 88 minutos también hay evolución del personaje, música a lo Hitchcock, persecuciones originales, rápidas luchas morales y además, te hace pensar. ¿Qué más se puede pedir? :-)
En medio de un glamour fashionista (con planos demasiado rápidos para su importancia de diseño en vestidos, bolsos y zapatos) encontramos esta comedia donde despuntan grandes valores: la amistad, el amor, el perdón. Me resultó un tanto brusco el giro de los protagonistas en diversos tramos del film (supongo que fruto de los cortes para no sobrepasar los 148m). Hay personajes divertidos (la asistente de color), hay otros más arquetípicos (el asistente bodas gay), otros extraños (el marido calvo). Las 4 chicas protagonistas están simpáticas y supongo que acordes con su anterior vida en la serie de TV. La película, aún siendo comedia, refleja 2 improntas de género: en los hombres, el hacer algo gordo e intentar volver atrás arrepentidos; en las mujeres, tenerlo todo y aún así sentirse insatisfechas.
Sales con el sentimiento de que te han tomado el pelo, pero también es verdad que te ha tenido 2 horas con un suspense entretenido basado en una ingeniosa idea inicial. Los actores son un poco mediocres y hay partes del guión que no tienen mucho sentido (casi todas las partes del lío interno de la pareja protagonista). Es una historia doble: la grande, a nivel social y la pequeña, metida con calzador, entre la pareja. Vislumbré un cierto homenaje a Los Pájaros, del maestro Hitchcock. La película nos ofrece todos los elementos e ingredientes del cine de Shyamalan, pero con una forma de hacer el final original frente a sus predecesoras.
El pasado sábado asistimos en el programa La Noria (Tele5) a una interesante batalla entre la voracidad y malicia periodística-televisiva y la humildad, bondad y simpatía de una inocente. Se trataba de Esther, una expulsada OT. Asistimos atónitos al despellejamiento dialéctico. La trataron a degüello, metiéndose con ella, humillándola, riéndose de ella incluso con mal gusto :"¿Aceptarías 50.000 euros de Interviu por enseñar tus tetillas?" ¡Qué fácil es atacar al débil! No obstante, ella respondió a todo con naturalidad, con inocencia, con humildad, con palabras sinceras, sin ninguna malicia, reconociendo sus errores y limitaciones (algo impensable en TV o política hoy en día),... Poco a poco empezó a darles una lección tal que al final tuvieron que callarse viendo que no les daba nigún juego morboso. En el test final (cantar trocitos de canciones) la volvieron a tratar como a un mono de feria, pero los que salieron como estúpidos y ridículos fueron ellos con las buenas y afinadas réplicas que hizo ella.
Siguiendo la estela de Smoking Room, Arcadia ó de El método nos encontramos con esta comedia cruda sobre el tema de la empresa, los comportamientos humanos dentro de ella y la triste y patética mirada que cada personaje nos devuelve. La cámara, a veces lejana, nos deja ver unos estupendos planos generales para la reflexión donde en un entorno natural, limpio, grandioso se respira, en los planos cortos, la ira, la hipocresía, la envidia, la tensión en el ambiente laboral. Comedia ácida fundamentada en el buen hacer de los actores, con buena caracterización de roles (psicólogo, pelota, enchufado, veterano, trepa,...) y que nos deja un sabor amargo sobre la depredación humana en un ambiente de ambiguas e interesadas relaciones. Recomendable.
El cine lleno. La cara de nuestros amigos de la foto rebosante de felicidad por los ingresos a recoger. El público friki sonriente al escuchar a todo gas la trompetería de la fanfarria de Indiana Jones y traslucir en las primeras escenas las sombras chinescas el sombrero de Indi. Comienza el espectáculo. Se agradece volver a encontrar a los antiguos actores, el guión sigue un poco la pauta del Templo Maldito, pero 20 años después donde la bomba atómica y los fenómenos paranormales están más en boga pero con una estructura análoga. Quizá demasiado largas las persecuciones y exceso de acción para un Harrison Ford mayor, pero que no desentona. Me gustaron algunos guiños a la predecesoras (el Arca, el padre, el despacho,...). Los datos históricos a veces nos desbordan en una rapidez de explicaciones pero la acción, que a la postre es lo que interesa en la película, se sigue bien. El desenlace quiere tener una mezcla de Arca perdida y de Santo Grial. Final feliz, al más puro trauma Spielberg.
Muy interesante y cautivadora la exposición sobre Picasso en el Reina Sofía (Madrid) donde se han fundido los cuadros ya existentes de Madrid con los del Museo Picasso de París. ¡Más de 400 cuadros! Muy bien montado todo en 4 grandes salas correspondiendo a sus etapas:Estad atentos a ir porque la quitan el 5 de Mayo 2008.
Aunque a veces puede ser un poco predecible, hay una artimaña premeditada en el guión que engaña al espectador y que resulta bien interesante. Os animo a probarla. Una historia coral que enlaza a EE.UU y África, con un montaje bien peculiar en la forma de enlazar escenas y con unas subhistorias privadas que le aportan engranaje. Su visionado da también para la reflexión sobre la seguridad, las torturas.. y sobre todo la mentalidad a veces tan diferente y a veces tan igual entre lo árabe y lo americano.
Iba con mucha ilusión y espectativa a ver esta esperada película y me encuentro con un grupo de jóvenes capitaneados por Kevin Spacey que envueltos en decorados lujosos y coloridos dan rienda suelta a un guión de lo más simplón, previsible y socorrido. Los detalles (cambio de personalidad brusco, deudas y acertijos simples, sospechosos movimientos de los personajes) hacen que sea una película que casi no llega ni a entretenida. Además la lección moral del final no deja de ser sorprendente y poco ejemplar. :-)
Versión moderna, dinámica y recortada del famoso musical de los 70. Una versión más minimalista en decorados, modernizada en vestuario, con recortes en las canciones, unas estupendas voces (a caballo entre la ópera rock y el heavy metal) y una elección de textos de lo más revolucionaria (con gran protagonismo para María Magdalena y Judas). El espectáculo fue in crescendo. Me gustó mucho más el segundo acto, con más coreografía, números con más peso, cantos corales estupendos ("Huerto de los olivos", "Visita a Herodes", "Regreso de Judas"). El final reflexivo, misterioso e impactante, remarcado por disonancias de sopranos (a lo 2001), resulta de lo más original en esta historia donde el mismísimo Jesús siente lo que el propio Bergman definiría como el silencio de Dios. Recomendable.
Se terminaron las Elecciones Generales 2008. Un poco de descanso y reflexión postelectoral. Los resultados son los que son, sin embargo sigo viendo una buena injusticia en el reparto de escaños debido a la ley de D'Hont que España adquirió al iniciarse la democracia (1976). Por esta ley se producen casos curiosos y llamativos: IU recibe 1 millón de votos (2 escaños) mientras que PNV con 300.000 votos recibe 6 escaños. El nuevo partido generalista de Rosa Díez, el PUyD, recibe también unos 300.000 votos y sin embargo sólo 1 escaño en el Congreso. Vamos, que este sistema de reparto favorece claramente a los partidos mayoritarios y a los puramente nacionalistas/regionalistas (donde mucha gente concentrada vota a un partido). La intención de esta ley, es buena: se busca el equilibrio territorial, que todas las provincias se vean representadas en el Congreso para que no se olviden de ellas pero ¿por qué no se reparten los escaños proporcionalmente al número de votos generales y que luego los asuntos locales se pongan sobre la mesa en el Senado y con las elecciones autonómicas/municipales?
Un tanto incómoda de ver esta película (un poco larga, ruda, visceral, simple...). Si dividimos la película en 3 partes, he de reconocer que las 2 primeras me gustaron en su estética y en su planteamiento, pero la última no (quizá porque el personaje hablaba demasiado de sí mismo y la acción no daba mucho más de sí). La música, muy variada, nos muestra un misterio, una profundidad y sobre todo una expectativa que luego no se ve refrendada ni por la acción ni por la evolución de los personajes. La sospechada rivalidad entre los 2 focos principales (empresario, religioso) está en desigual fortaleza con lo que la lucha entre ellos es siempre previsible. Algunos planos secuencia son estéticamente muy buenos, sobre todo en la primera parte. Prescindible.
Este western urbano supone una verdadera transgresión del género y del concepto de guión. Rasga con un bisturí la idea de 2 fuerzas dramáticas que luchan por un fín, así como el clásico presentación-nudo-desenlace. Rompe todas estas normas para buscar un suspense sin música, una fuerte tensión basada en los planos detalle, unos inteligentes personajes que combaten cada cual a su manera. Una acción lenta pero trepidante alternada con momentos de calma que anteceden inesperadamente a hechos fríos y crueles. Los detalles, sutilmente colocados, van dando las pistas necesarias al espectador atento para seguir el hilo conductor. Como trasfondo la reflexión sobre la sociedad actual, asombrada por los escándalos pero curiosamente acostumbrada a la barbarie.
¡Impresionante ¿verdad? No se trata de un fotomontaje. Es real y a la venta próximamente. Los nuevos modelos de portatiles ultraportables conforman una buena competencia a los nuevos modelos de móviles (tipo iPhone). Además, hasta ahora la reducción de un portátil en tamaño suponía una subida de precio importante, sin embargo, los modelos de los que hablo rondan los 350 euros. Ideales para viajar, para navegar, con capacidad de conexión WiFi por doquier. Impresionante ¿verdad?
Veo en la película 2 líneas de análisis: a nivel GLOBAL la trama es interesante, con mucho diálogo (quizá excesivo para ser cine), con altibajos de tensión y con final retruécano. A nivel DETALLE, creo que los hay buenos y delicados (la referencia a Wittgenstein, Gödel, la ofrenda Musical de Bach para intuir la ruptura del sistema lógico, el estupendo plano-secuencia previo al primer crimen, los primeros planos boca-oreja, etc) y otros más chabacanos y desafortunados (los spaghetti sobre el cuello, los secundarios deformes, la poca inteligencia de Frodo para no acordarse de los símbolos pitagóricos, los excesivos planos pechugones de la chica,....). Película intensa, a veces un poco cortante pero entretenida.
Una película interesante y bien llevada. Sigue los cánones del buen guión: 2 elementos antagónicos que vamos conociendo y van creciendo cada uno por su lado, que se van realizando y que chocan en una caballerosa lucha de inteligencias. Se van alternando escenas e imágenes elegantes y dignas con otras crudas y realistas de un mundo cruel. Secundariamente vemos claves de cómo gestionar eficientemente un negocio: intuición, seriedad, implicación y agresividad/dulzura cuando toca. Están cuidados bien los detalles y el ritmo es bueno siendo una película de 160 minutos. Quizá la última parte, más rápida, quede un poco desajustada con el resto, pero por tratarse de hechos reales se debía contar todo. Recomendable.
Había oído muchas cosas inaceptables de este "nuevo" windows, pero estas Navidades con la compra de un nuevo portátil para mis padres lo he podido comprobar de cerca. Y no sólo lo digo por sus internos problemas de eficiencia (mala gestión de la RAM, mucha ocupación de los procesos, cortes de pantalla gráfica entre aplicaciones, etc) sino por razones mucho más de bulto: no deja (des)instalar nada, se producen rupturas en el explorador de archivos, no maneja bien los dispositivos (la webcam integrada no funcionaba), incluso... ¡aparecen pantallazos azules! (que sólo se solucionan con apagado por botonazo y que es algo que no veía desde el W95). Lo peor del asunto es que todas las marcas exigen actualmente el VISTA en sus ordenadores nuevos. ¡Mal asunto! En fin, que si no se toca nada de nada, quizá el Vista sirva si hay suerte, pero para cualquier otra cosa mejor formatear, pasar a Windows XP SP2 ó Linux y buscar los drivers.