Margin Call

* Dirección:Frank G. DeMarco
* Mi valoración: 8 (sobre 10)

Interesante y notable película sobre un tema peliagudo. La trama nos lleva a la noche del origen del tsunami que hoy nos afecta cada vez más: la crisis financiera. Con un reparto de actores de impresión, nos van desgranando aquellas primeras horas, los distintos comportamientos, las tensas reuniones y las decisiones de los causantes para salir indemnes de la tragedia que afectaría a todo el mundo. Con austeridad y robusto guión, la película nos mantiene en interés durante las casi 2 horas. Hay contextos e implementaciones financieras que se nos escapan, pero el objetivo de la película resulta cristalino. Secundariamente, somos testigos de los comportamientos en las jerarquías de las empresas modernas. Recomendable.

ALCINE 2011

Un año más, Alcalá de Henares se convierte en el foco del cortometraje español en su edición del certamen nacional. Tras ver todas las sesiones del sábado, me queda un sabor agridulce. De los 18 cortos expuestos, sólo 5 ó 6 se pueden considerar como tales. Obras muy destacables como "La última secuencia", "La Granja", "Ahora no puedo", otras bastante dignas como "Grand Prix" ó "El abrigo rojo" frente a otras obras de tipo documental, más propias de ejercicios fílmicos o ensayos que propias de un festival, me refiero a "Odysseus", "Al-madina", "Notas de lo efímero" (sólo salvable por sus subtítulos) y sobre todo "When in Bucharest" del que sigo estupefacto de que haya sido seleccionado. No sé qué tal habrán estado las sesiones del domingo. La próxima semana veremos el veredicto del jurado.

Melancolía

* Dirección: Lars von Trier
* Mi valoración (sobre 10): 8

Satisfecho y agitado salí del cine. Melancolía no es una película, son dos. En la primera, Justine, en colores cálidos asistimos a la problemática social, familiar, diversa de los encuentros burgueses, de los actos familiares transgredidos, con toques a veces surrealistas, a veces duros, a veces enigmáticos en todas sus relaciones. En la segunda, Claire, en tonos azulados, nos adentramos en un cuarteto fílmico al más puro estilo Ingmar Bergman con la evolución de unos comportamientos, reacciones y actitudes ante el mayor de los problemas posibles: el fin del mundo. El lenguaje formal es el típico de Trier con saltos de eje, jumpcut, cámara en mano nerviosa, estupendo montaje y esta vez con tema musical: el preludio de Tristán e Isolda repetitivo y situado en instantes clave. También hay sitio para el misterio (¿qué pasaría en el puente?), la evolución de personajes ante distintos problemas y algunos de los más espectaculares fotogramas vistos últimamente.